Se viene el m-commerce: ¿estás listo?

Una de las certezas acerca de la nueva normalidad es que el móvil se afianzará como punto de contacto digital clave con los consumidores. Si estás planeando tus objetivos para 2021, te acercamos los datos que necesitas para trazar la hoja de ruta que te lleve hacia ellos. En esta nota, 4 preguntas clave para ponerte en marcha.

Al planificar un nuevo año, tenemos claro a dónde queremos llegar con nuestros objetivos de marketing. Sin embargo, cómo será el recorrido dependerá de múltiples factores. Cuando te plantees tu estrategia de marketing, el primero que debes tener en cuenta es que el móvil seguirá siendo protagonista en la experiencia de compra. Al día de hoy, el 86% de los consumidores investigan en sus smartphones antes de comprar un producto o contratar un servicio, incluso estando en el local físico. ¿Cuál será el rol de los dispositivos móviles en la nueva normalidad? Según un informe de E-Marketer, se estima que el m-commerce se duplicará antes de 2023.

Ahora bien, si quieres estar preparado, debes tener en cuenta que la clave del éxito residirá en la experiencia de compra que les ofrezcas a tus usuarios. Aquí, 4 preguntas que debes hacerte para ponerla a prueba y descubrir dónde debes poner mayor foco.

1. ¿Cómo es la experiencia que ofreces hoy?

Contar con un sitio web responsivo es clave, pero no es suficiente para lograr conversiones. De hecho, una mejor experiencia del usuario es la que puede acercarte a tus objetivos comerciales. Sin ir más lejos, el 69% de los compradores digitales de nuevas categorías destacó la sencillez a la hora de iniciar sesión en el sitio web o app y su funcionamiento en su experiencia de compra. Si quieres mejorar aún más el viaje del consumidor, considera presentar la información que precisan de una manera concisa que evite tener que hacer mucho scrolling. Además, ten en cuenta que tipear en una pantalla pequeña puede ser agotador. Por eso, procura que tu sitio recuerde los datos de envío y de los métodos de pago de los usuarios y evita que deban rellenar formularios ofreciéndoles la función one tap sign-in. También puedes poner a disposición medios de pago sencillos como Google Pay, PayPal, y otros.

2. ¿Estás midiendo la velocidad de tu sitio con las métricas correctas?

Sabemos que la velocidad es esencial. En cifras: si tu sitio web ofrece una experiencia móvil excelente, tienes 82% más de probabilidades de que los usuarios compren desde sus smartphones. Pero ¿qué significa que tu sitio sea rápido? Es común escuchar acerca de la velocidad de carga en milésimas de segundos, pero la realidad es que hay múltiples momentos durante la carga que pueden afectar si un usuario lo percibe como «rápido». Entonces, en lugar de chequear una sola métrica, durante la carga cronometra cada uno de los momentos que pueden afectar la percepción que tiene el usuario sobre la velocidad. Puedes preguntarte: ¿cómo ha respondido el servidor?, ¿el contenido desplegado es suficiente?, ¿pueden interactuar inmediatamente con la página o deben esperar? Consultar herramientas como Prueba mi sitio o Lighthouse pueden ser muy útiles para encontrar las respuestas que buscas.

3. ¿Estás comunicando la información que los clientes necesitan conocer?

Presentar tus productos de manera clara en la web es fundamental, sobre todo porque a veces puede ser difícil saber cómo un ítem puede verse en la vida real. Si los productos que ofreces no están bien representados en tu sitio, tus clientes no se sentirán seguros de efectuar la compra. Por eso, considera incluir descripciones completas (las medidas y detalles de los materiales son esenciales) y de establecer comparaciones; de que las fotografías tengan una buena resolución o, si te animas a dar un paso más, considera utilizar la realidad aumentada. Y un dato que parece obvio pero puede fallar: el contenido que más buscan los compradores online es el precio (70%), así que verifica que siempre esté presente y actualizado. Un buen recurso para lograr todos estos objetivos, y que además no tiene costo para tu marca, es mostrar tus productos en la pestaña de Google Shopping.

4. ¿Ya tienes tu app? Si no, deberías considerar desarrollar una

¿Sabías que durante el primer trimestre de 2020 el tiempo semanal promedio que las personas le dedicaron al uso de apps aumentó 20% en todo el mundo? Como consecuencia de la pandemia, existen muchísimas maneras en las que puedes ser útil a través de tu aplicación. ¿Quieres saber cómo? Las apps se han convertido en un eslabón fundamental de la omnicanalidad. Por un lado, ayudan a tus clientes; por otro, hacen crecer tu negocio. Interactuar con los consumidores a través de la app te permitirá recolectar datos y detectar tendencias rápidamente. Además, podrás ofrecerles la posibilidad de reservar un producto de manera anticipada, asistirlos de manera personalizada, enviar notificaciones (como pueden ser cambios en el stock o en los horarios de la tienda), e incorporar servicios, como la posibilidad de pagar a través de la app para evitar el contacto físico. Una vez que esté lista, recurre a las campañas de aplicaciones para darla a conocer.

El m-commerce llegó para quedarse y estar preparado debe ser parte de la agenda y el presupuesto que destines para 2021. Si todavía tienes dudas sobre el potencial que pueden ofrecer los móviles para tu negocio, visita nuestra colección móvil y para ponerte en marcha.