En este elemento, a través de la investigación secundaria, debes conseguir todos los insumos de la competencia y el mercado que te ayudarán a realizar una estrategia ganadora.
Competencia:
Las empresas comerciales deben conocer las mezclas de marcas competidoras, los precios, penetración de sus productos o servicios, sus atributos, beneficios, calidad de la atención, espacio en los anaqueles, estrategias de merchandising, mensajes publicitarios, activos (aquellos que le suman a la imagen) o pasivos (aquellos que le restan) de sus marcas, etc.
En política se zigzaguea de la misma forma: ¿Qué ofrecen tus competidores? ¿Qué tanta credibilidad tienen? ¿De qué forma canalizan y diagraman sus mensajes? ¿Cuáles son los activos y pasivos de sus marcas? ¿Con qué recursos cuentan? ¿Quiénes son sus aliados visibles e invisibles? etc.
Todo esto con el objetivo de utilizar estos insumos para generar tu estrategia y diferenciarte siendo único y mejor que tus adversarios, pero en los elementos que realmente le importan a tu público objetivo.
Mercado:
Si transas bienes y servicios debes dominar los siguiente: ¿Qué barreras de entrada o de crecimiento existen? ¿Qué barreras intrínsecas a tu empresa puedes generar para desacelerar a la competencia? Se debe medir también el impacto de los medios, las nuevas tecnologías, encontrar posibles influenciadores, estudiar la confianza en el sistema legal, las leyes que nos competen, el tamaño del mercado, el crecimiento o decrecimiento de éste, la facilidad de importar o exportar productos, la elasticidad de los precios, posibles alianzas, el medio ambiente, si existe personal calificado, etc.
Permutando ahora al ámbito político debemos estimar la densidad de votantes según criterios geográficos y demográficos, la ampliación del padrón electoral y el posible crecimiento o decrecimiento de los votantes, encontrar las necesidades específicas de cada zona de interés, localizar a nuevos líderes (no te rías, los políticos quieren ser eternos y ahogar a cualquier nuevo dirigente, pero lo que descifrarán en mis escritos es mi interés en que conozcan lo que debería de ser marketing político no lo que es una campaña política, más adelante nos extenderemos entre las diferencias de cada uno), la credibilidad y transparencia de las instituciones involucradas en la elección, etc.
Dentro de lo anterior es muy significativo descifrar el cordón umbilical que alimenta la fuerza de cada adversario, no necesariamente es el dinero, ni otros recursos; podría ser el odio, el resentimiento o algún factor externo que mueva o no a un votante, o el magnetismo de una marca, etc.
Lo más importante de este análisis es encontrar la “brecha”, el “hueco”, saber cuándo, cómo y a donde apuntar para ganar y tener la info suficiente para hacer “numeritos”, proyecciones, y distintos escenarios. Persona que no haga y no le encanten los numeritos, no entra en la categoría de mercadólogo.
Ahora implementamos, entre otras, una herramienta tan simple y tan bella como el FODA, pero debemos enfocarlo no solo teniendo a nuestra organización como eje central, sino también a cada uno de nuestros competidores.
Como ya observaste, no hablamos de investigaciones cualitativas ni cuantitativas para conocer hábitos, preferencias, posicionamientos, etc. Espero más sobre estos temas en la siguiente P.
Y recordemos que #Marketing es: “todas las actividades involucradas en la venta de productos, servicios o ideas que entregan los resultados esperados a través de la satisfacción de necesidades.”
#MarketingMINT “Si es posible, nunca asuma nada”.
#SeeYaSoonBaboons