Cuando nuestro cerebro recibe estímulos externos a través de los sistemas sensoriales, registra esa información, y la procesa e interpreta. De esta manera, es como cada persona construye su propia realidad desde los estímulos que recibe y su construcción e interpretación propia. De allí, que cada individuo pueda percibir un mismo hecho de manera distinta a otro.
La razón de la diferente perspectiva, se debe a que todos aplicamos filtros a los estímulos y esos tamices dependen de factores externos, (como la intensidad, tamaño o contraste), y otros elementos internos (como son nuestros propios intereses, las necesidades o los recuerdos). En términos del neuromarketing, esto se resume en que lo que el cliente percibe no es una respuesta directa de lo que le rodea, sino una interpretación o construcción interna que el realiza.
De allí, que el neuromarketing abre un nuevo campo de acción en los negocios: cuáles son las percepciones de los consumidores y entonces, definir las estrategias más adecuadas para llegar hasta ellos, seducirlos y fidelizarlos. Como esta disciplina ha puesto en evidencia que la toma de decisiones tiene fuerte raigambre en el sistema emocional, se cristaliza aún más por qué las estrategias de marketing más exitosas son las que focalizan en los sentimientos y el hedonismo, y desatan la compra por impulso y a largo plazo, la fidelidad de marca.
Fuente: http://mastermarketingla.com/que-es-neuromarketing-y-como-utilizarlo-en-los-negocios/